Los inviernos en el Mont Blanc no son lo que solían ser. Tras una noche de fuerte viento de componente SE y aumento de temperaturas, empezaba a ser obvio que no iba a ser el día en él que esquiar uno de los couloirs de Grand Montets.
Tras una mañana de café mirando el mapa haciendo hipótesis de lo que podía estar bueno, de dar vueltas con el coche, de temperaturas que siguen subiendo y de mucha nieve derretida en zonas de bosque, acabó de ser definitivo que no iba a ser un día de esquí para mí.
De camino a casa pase por la zona de escalada de Gaillands justo a la salida del pueblo de Chamonix. La roca estaba seca, la pared estaba al sol y mi coche marcaba 8º. Eso es sin lugar a dudas condiciones perfectas para escalar. Le convencí a mi amigo Jake que la primavera había llegado al valle, y nos dirigimos a la pared.
LLevamos bastante ropa, obviamente, estamos a mitad de febrero; pero el sol calentaba a pie de vía y cocía a media pared. Desafortunadamente para nosotros, todos los crux de las vías estaban en esa sección. Me quedo con el recuerdo de Jake resoplando quedándose en camiseta durante algún tiempo al bajarse de la segunda vía.
El año pasado se me hacía extraño tener que escalar durante las vacaciones de navidad porque no había suficiente nieve para esquiar y además que la temperatura fuese suficientemente buena como para hacerlo en roca. Bueno, hay inviernos que empiezan antes, y otros más tarde, pero lo de este año está a otro nivel. En Chamonix el Invierno llegó la semana pasada, duró un par de días y ahora parece que estamos en Pascua. Cuanto más tiempo paso en Pirineos y más conozco Chamonix, más me oiréis decir que para esquiar, sin duda me quedo con la Val d’Aran.
Sin embargo no todo son malas noticias para el valle del Mont Blanc. Este enero han tenido un hielo de calidad excepcional y se han visto cascadas que rara vez se forman grandes y robustas. Justamente esa es la belleza de Chamonix, es un patio con tantas posibilidades que no necesitas depender tanto del esquí y es sin duda el lugar para llevar tu montañismo al siguiente nivel.
Las aiguilles de Chamonix dando ambiente.